Acrílico del maestro Gustavo Parra

 

De nuestros

Colaboradores

 


 

EL NUEVO SISTEMA DE SEGURIDAD SOCIAL EN SALUD

LOGROS Y DESAFIOS

 

Por: Roberto Esguerra Gutiérrez. MD. FACP[1]

En diciembre de 2000 se completarán siete años de la sanción presidencial a la Ley 100 que reformó el sistema de seguridad social de Colombia. Sin embargo, al  realizar un balance de lo que ha ocurrido en los primeros años, es necesario aclarar que el nuevo sistema no entró en vigencia plena sino en octubre de 1995, cuando fueron promulgados los decretos que establecieron con claridad las reglas del juego para el régimen subsidiado. Por lo tanto, el balance en realidad se refiere a los primeros cinco años de funcionamiento del nuevo sistema.

Tal vez la primera advertencia es que la Ley 100 fue aprobada en las postrimerías del gobierno que la tramitó en el senado y que creía en sus bondades ya que diferentes tropiezos de tipo político impidieron que fuera aprobada al iniciarse.  Además existían muchas dudas sobre la actitud que tomaría el nuevo gobierno, lo que  precipitó una avalancha de reglamentación que pretendía asegurar las reglas básicas. Esa precipitada carrera fue vista con recelo por el nuevo gobierno y ello originó prevención y una actitud muy dilatoria por parte de los nuevos funcionarios, durante los primeros meses de la nueva administración.

1-LOGROS.

1.1-Afiliación al sistema.

De acuerdo a los datos oficiales, en 1993 solamente  21% de la población se encontraba afiliada al sistema de seguridad social. Cerca de 18% estaba en el Instituto de Seguros Sociales (ISS), 2% pertenecía a  otros sistemas como las fuerzas armadas, la Caja Nacional de Previsión o empresas estatales  de las áreas de comunicaciones y petróleos. Finalmente cerca de 1% estaba en sistemas privados de medicina prepagada.

Los datos oficiales más recientes indican que 58%, es decir cerca de 23 milllones de personas, se encuentran afiliadas a junio de 2000. Esto incluye 9.1 millones en el régimen subsidiado y 14 millones en el contributivo. Recientemente la Superintendencia nacional de salud  ha llamado la atención sobre la posibilidad de que exista un número importante de registros duplicados, que estiman que reduce la cifra real de afiliación a  19. 2 millones, caso en el cual el cubrimiento actual alcanzaría  48% de la población. Algunos sectores especialmente en las EPS del sector privado piensan que la cifras de duplicados es mucho menor y que en ningún caso llega a las cifras mencionadas.

En cualquier caso el resultado en el aumento de afiliación es sumamente bueno, aunque la meta inicial de alcanzar la cobertura universal en el año 2.004 se encuentra muy distante y difícil de lograr. Naturalmente esta meta fue establecida cuando se pensaba que el país continuaría con un crecimiento del 5% anual en su PIB y con un desempleo cercano al 12%. Como es sabido la crisis económica llevó a crecimientos negativos como el de 1999 (-5%) y disparó el desempleo a 20%.

1.2- Aumento de los recursos.

Parte de los objetivos fue aumentar los recursos que el país destina a la salud. Para 1993 el gasto en salud alcanzó el 6% del PIB que para ese año fue de 76.954 millones de dólares, lo que significa que el país invirtió en salud ese año 4.617 millones de dólares. En contraste, en 1999 Colombia  invirtió en salud 9.658 millones de dólares, equivalentes al 10% del PIB del año. Esto quiere decir que la reforma le ha significado al sector 4.000 millones de dólares nuevos por año. El país logró duplicar los recursos para salud en estos años.

Naturalmente mayor inversión no significa necesariamente mejores resultados en salud, de manera que la pregunta siguiente es si los mayores ingresos se han invertido de manera adecuada y han producido un verdadero impacto en mejorar la salud de los colombianos.

1.3- Satisfacción de los usuarios.

Al ser los pacientes la razón de ser de cualquier sistema de salud, su percepción sobre el sistema debe ser importante a la hora de evaluar resultados. Las primeras encuestas de satisfacción realizadas en 1997 mostraron unos resultados que parecieron demasiado optimistas en el momento ya que el sistema prácticamente arrancaba. En ese estudio 86% de las personas se declaró satisfecha o muy satisfecha con los servicios, además, 79% de los entrevistados consideró que el nuevo sistema estaba mejorando la calidad de los servicios.

En la ciudad de Bogotá el programa “Bogotá cómo vamos” creado para evaluar la gestión del alcalde, ha realizado tres encuestas consecutivas (1998,1999 y 2000) en las cuales se aprecia un incremento progresivo y sostenido del numero de personas que califican el sistema como bueno o muy bueno: 56%,61% y 71% respectivamente. Llama la atención el bajo numero que lo califica como malo o muy malo: 12%, 14% y 10% respectivamente.

Una encuesta nacional realizada por Profamilia, una organización dedicada a temas de población, mostró nuevamente datos interesantes cuando en promedio la gente califica con 4 puntos sobre cinco la calidad de los servicios, siendo levemente superior la satisfacción en el régimen subsidiado. Los puntajes de calificación mas altos los obtienen los médicos generales y los especialistas y los más bajos los programas de promoción y prevención.

En conclusión todas las encuestas muestran de manera consistente satisfacción de los usuarios y lo que es más importante, ésta parece estar aumentando progresivamente tanto en el régimen contributivo como en el subsidiado. También el número de personas que califican mal es cada vez menor.

1.4-  Desarrollo institucional.

La entrada en vigencia de la ley significó un gran reto para todas las instituciones del sector que debieron ajustar sus sistemas gerenciales y  para poder sobrevivir en el nuevo entorno. Especialmente el sector hospitalario y en particular el subsector público tuvieron que trabajar activamente para lograr su supervivencia institucional. Aunque estamos muy lejos de alcanzar las metas, es indudable el desarrollo institucional del sector hospitalario y el esfuerzo que continúan haciendo las instituciones para mejorar.

Del total de 28 EPS, 22 pertenecen al sector privado y son empresas totalmente nuevas que aportan conocimiento, recursos y empleo en el sector de la salud. También en el sector solidario numerosas organizaciones se convirtieron en ARS para trabajar en el régimen subsidiado.

Este desarrollo institucional evidente se ha visto presionado y respaldado por una opinión pública interesada en el tema, deliberante y exigente, que antes de la Ley se mostraba indiferente y apática con el sector. Hoy no pasa un día sin que los diferentes medios dediquen espacio y tiempo  a los diferentes aspectos de la salud y de funcionamiento del sistema.

1.5- Régimen subsidiado.

El hecho de que hoy nueve millones de colombianos pobres estén afiliados y tengan la posibilidad de acceder a servicios es un hecho de gran importancia social. Naturalmente todavía queda un trecho grande por recorrer pues probablemente existe otros nueve millones en estado de pobreza que deben incorporarse al sistema, lo que constituye un reto para los próximos años.

Debe destacarse que en algunos lugares, como la capital de la república se ha alcanzado un cubrimiento de 100% para los niveles I y II del Sisbén, que es el mecanismo que el sistema emplea para identificar los ciudadanos candidatos al subsidio.  Probablemente el reto, en ciudades como Bogotá, es llevar subsidios parciales a niveles mas altos , que pueden sufragar parte de su afiliación pero están en incapacidad absoluta de hacerlo totalmente,

1.6- Otros hechos.

Ha existido inquietud sobre si la reforma ha hecho demasiado énfasis en los aspectos económicos y sociales del sistema y ha descuidado los de salud pública. El dato reciente sobre mortalidad infantil, que es uno de los indicadores mas sensibles, es bien diciente: el país se encontraba en tasas cercanas a 40 muertes por mil en el año 1989, por lo que en la Cumbre Mundial de la Infancia en 1990 se comprometió a reducir la tasa en un 30% para llegar a 25 muertes por mil. Los datos de la reciente encuesta de Profamilia demuestran que la tasa actual es de 21.5, superando la meta propuesta y el promedio de América Latina que es 33.

Los cálculos indican que este logro evitó la muerte de 60.000 niños en la última década.

Los datos  del informe de la OMS sobre la salud mundial son también dignos de ser considerados pues otorgan el primer lugar entre 196 países en lo referente a equidad financiera, el puesto 41 en logros y el 22 en desempeño global, en lo cual supera a todas las demás naciones de la región. En el indicador “nivel de salud” Colombia queda en lugar intermedio en la América Latina (puesto 11 entre 22) y en el mundo en el discreto puesto 74. El mismo informe otorga el primer lugar en el mundo en equidad financiera a nuestro sistema.

 

 

2-INTERROGANTES POR RESOLVER

2.1- Calidad de los servicios.

Mucho se ha especulado sobre el efecto que la reforma ha tenido sobre la calidad de los servicios. Especialmente en el sector médico se sostiene que la calidad se ha deteriorado de manera importante, aduciendo un deterioro en la relación médico paciente y la presión para dedicar muy poco tiempo en la atención de cada persona.

Todas las afirmaciones en uno u otro sentido con relación a la calidad están basadas en percepciones personales, sustentadas por ejemplos de casos aislados o  relacionadas  con situaciones anecdóticas. Hasta ahora no se conoce un estudio que con indicadores demuestre que ha sucedido con la calidad de los servicios.

2.2- Los ingresos de los médicos.

Es evidente que un importante sector médico ha adoptado una actitud negativa con la reforma acusándola de ser la culpable del deterioro del profesionalismo médico y de los ingresos de los profesionales.

Un estudio realizado por la Fundación Presencia, con encuestas enviadas a mas de 3.000 médicos en todo el país, demostró hechos bien interesantes en cuanto a lo ocurrido con los ingresos de los médicos en un lapso de tres años (1995-1998). Aquellos médicos situados en el quintil superior de ingresos, generalmente especialistas exitosos de las ciudades principales, vieron reducir sus ingresos de manera importante, cercana 40%. Los profesionales situados en los quintiles intermedios no sufrieron variaciones importantes. Aquellos situados en el quintil de menores ingresos tuvieron un aumento cercano  40%. Ha ocurrido pues una redistribución del ingreso médico que ha favorecido ampliamente a los médicos de menores ingresos.

Otro hecho interesante que demostró este estudio es que al comparar lo sucedido con el ingreso promedio de los médicos en ese período con otras profesiones (abogados, arquitectos, ingenieros), el ingreso médico tuvo un mejor comportamiento y comparativamente mejoró con relación a las demás profesiones.

Falta saber que ha ocurrido en los últimos meses y que tendencia muestran los ingresos de los especialistas, pues podría pensarse que luego del efecto inicial de redistribución podría seguir un período en que los ingresos se estabilicen o aún mejoren un poco en aquellos sectores que sufrieron el mayor impacto inicial. 

 

3- RETOS PARA EL FUTURO

3.1- Sistema de Información

Probablemente el mayor problema del sistema es carecer de información unificada, oportuna y confiable. Hoy en día no existe seguridad sobre las cifras y aún en el numero de afiliados xisten diferencias muy importantes. Mientras no se cuente con un sistema de información adecuado será posible que existan dobles afiliaciones, fraudes, errores y malas interpretaciones de la realidad.

Afortunadamente el gobierno nacional ha anunciado su determinación de conceder prioridad a este tema y el propio presidente Pastrana ha comunicado su compromiso con este tema.

3.2-  Control a la evasión

Una evasión promedio de 30%, que llega a limites cercanos a 90% cuando se trata de trabajadores independientes de altos ingresos, está privando al sistema de  recursos muy importantes. 

Este reto lo ha entendido el Gobierno nacional, que recientemente ha anunciado la creación de un Registro Único de Aportantes (RUA), así como una central única de recaudo que tendría además la función de promover las afiliaciones. Es importante que esto no vaya a entrabar aún mas los mecanismos de pago y resulte en mayores dificultades para la liquidación y el pago de aportes, tanto por parte de las empresas como de los trabajadores independientes.

3.3- Cubrimiento universal

La reforma se encuentra a mitad de camino y probablemente en su punto más difícil pues la mayoría de los problemas que se viven, especialmente en los hospitales públicos, están relacionados con los llamados “vinculados” que son aquellas personas sin recursos que no se encuentran aún en el régimen subsidiado.

Es muy probable que buena parte de los problemas actuales no solo mejoren sino  desaparezcan cuando se llegue a la cobertura universal, inicialmente prevista para el año 2004. Aunque esta meta es casi imposible de lograr el país debe continuar empeñado en alcanzar ese objetivo lo mas pronto posible.

Fallo reciente de la Corte Constitucional restituye la obligación del aporte del estado a la subcuenta de solidaridad del régimen subsidiado para el par y pasu  de manera que por cada peso que aportan los trabajadores el estado deberá hacer lo propio. Con esto los recursos para afiliación de personas pobres aumentarán de manera importante en los próximos años.

3.4- Flujo de recursos

La difícil situación hospitalaria que ha vivido el país en los dos últimos años de la cual se ha culpado al sistema, en realidad no es consecuencia de éste sino de varios factores entre ellos los ocasionados por la crisis económica que vive el país y el incumplimiento de las normas vigentes.

Si se analizan los estados financieros de los hospitales colombianos tanto del sector público como del privado se podrá observar que en el P & G los resultados son buenos. Sin embargo, se vive una iliquidez completa por la  cartera que  ha alcanzado cifras muy altas y una antigüedad de hasta de 36 meses en algunos casos. Esa iliquidez es la que ha mantenido al borde del colapso a muchas instituciones.

Adicionalmente a los hospitales no se les reconocen intereses por estas demoras, mientras ellos sí tienen que reconocerlo a sus proveedores, a la vez pierden descuentos por pronto pago y con frecuencia deben recurrir al sector financiero en donde no existen líneas de crédito blandas para el sector.

Por lo anterior es de esperarse que una vez se adopten medidas que garanticen el flujo de los dineros la crisis del sector hospitalaria se aliviará y no es exagerado afirmar que podrá llegar a solucionarse por completo.

  3.5-Calidad  y libre escogencia.

La etapa en que entra la reforma hace indispensable hacer todos los esfuerzos posibles por garantizar la calidad de los servicios. Los éxitos logrados hasta ahora no tendrían importancia si no van acompañados de servicios de buena calidad.

Un elemento fundamental para presionar la calidad es la educación de la población para que aprenda a hacer usos de sus derechos y a la vez disponga de elementos para juzgar la calidad de la atención que se le ofrece. Los ciudadanos deben constituirse en los principales guardianes del sistema y de su calidad y para ello se requiere un enorme esfuerzo y una gran inversión.

Uno de los aspectos en que la gente califica mal al sistema, en la mencionada encuesta de Profamilia, es en la posibilidad de hacer uso de su derecho a elegir  dentro de las posibilidades que consagró la ley. Por otra parte la libre elección es uno de los mecanismos mas eficaces para premiar la calidad, por lo tanto todos los esfuerzos que se hagan para que los ciudadanos la puedan ejercer sin restricciones están ampliamente justificados.

 

Cartagena, septiembre 29 de 2000.



[1] Médico. Fundación Santa Fe de Bogotá. Presidente Fundación Presencia. Expresidente Asociación Colombiana de Hospitales y Clínicas.

 



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