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Animo de lucro y salud

New York: La Revista de la Asociación Ameriacana de Medicina Interna, JAMA , publica un trabajo que analiza la calidad de la asistencia médica en EEUU en función de un parámetro de gran interés: si la organización que presta la asistencia pertenece a accionistas que quieren beneficios o, por el contrario, si los proveedores de los servicios sanitarios no andan muy preocupados por aportar dividendos a nadie.

Expertos de la Universidad de Harvard, de Chicago y de Washington chequearon la calidad de la asistencia sanitaria de 248 organizaciones participadas por accionistas que pretendían beneficios y las compararon con la que ofrecían 81 empresas cuya intención final no eran los dólares. Los resultados son espectaculares.

Las personas cuya asistencia médica proviene de organizaciones con ánimo de lucro tienen, en EEUU, un cuidado médico básico peor que el que reciben los individuos afiliados a empresas que no reparten dividendos. Aquellos usuarios, comparadas con éstos, reciben menos vacunaciones, menos mamografías, menos citologías vaginales, menos cuidado prenatal y menos fármacos esenciales para un infarto agudo de miocardio.

El trabajo del JAMA ha levantado ampollas en EEUU entre los defensores y los detractores del sistema sanitario, cuando se debate en el Senado la estructura de la organizaciones que manejan la salud de una gran mayoría de estadounidenses, las HMO.

 

500.000 niños murieron de sida el pasado año

París: Medio millón de menores de 15 años murieron de sida en el mundo el año pasado, según el informe El Progreso de las Naciones 1999, hecho público por Unicef. Otros 600.000 niños contrajeron el sida, de los cuales más de 180.000 eran bebés contagiados por la leche de su madre. En el año 2000 habrá 13 millones de huérfanos a causa de esta enfermedad. Por otra parte, cada bebé de un país subdesarrollado nace debiendo 417 dolares en concepto de deuda al mundo rico. 130 millones de niños no están escolarizados y el trabajo infantil ocupa a 250 millones.

El Sida y la deuda externa son las amenazas más inminentes para los niños de los países no desarrollados, señala
El Progreso de las Naciones 1999. Unicef recalcó al presentar el informe que, aunque "los avances en países desarrollados dan la falsa impresión de que la epidemia está controlada", esto no es así, ya que dos terceras partes de los casos de la pandemia están en África, donde esa enfermedad ha matado a 11 millones de personas, de las que el 25% (2,75 millones) eran niños. Y la catástrofe va en aumento: un 64% de quienes nazcan en Botsuana en el 2000 morirán de sida antes de cumplir los cinco años.

Pero el problema no son sólo los niños fallecidos o infectados: el próximo año, 13 millones de menores habrán perdido a la madre o a ambos progenitores por culpa del sida en todo el mundo. En países como la India, Suráfrica o Camboya el número de huérfanos de madre se ha multiplicado por cuatro en los últimos tres años debido a esa epidemia.

La "crisis de los huérfanos", como la califica el informe, hará que su número en Asia se triplique en el 2000. Los "huérfanos del sida" tienen que cargar con el estigma de la enfermedad. Ello hace que se les aísle y que tengan menos probabilidades de ser vacunados contra otras enfermedades y más posibilidades de padecer desnutrición, analfabetismo, abusos y explotaciones.

Lo peor es que los cócteles de medicamentos no llegan a los países subdesarrollados, que ni pueden pagarlos ni tienen infraestructura para repartirlos. Sólo pueden utilizar campañas de prevención, como la ugandesa de "fidelidad, castidad y preservativo". En Tailandia, una campaña similar consiguió aumentar en un 50% el uso de condones entre los jóvenes.

La deuda externa es otra de las amenazas para el desarrollo de los niños. El dinero que los países emplean en pagarla es dinero que se sustrae a los servicios sociales básicos (programas de salud, nutrición, abastecimiento de agua potable, saneamiento y educación básica). Por ejemplo Filipinas gasta tres veces más en pagar su deuda que en atenciones primarias; Brasil gasta el doble, y Camerún, ocho dólares en deuda por cada dólar que invierte en fines sociales.

El informe enumera 24 países que deben más que lo que producen en un año. El caso extremo es el de Guinea-Bissau, que debe 3,66 veces su producto nacional bruto (PNB). La media europea es de 0,15 veces. La deuda externa española es de 0,12 veces su PNB. Cada niño de un país en desarrollo tiene ya al nacer contraída una deuda con los países desarrollados de 417 dólares, lo que no gana en un año el 20% de la población mundial, que vive con menos de un dólar al día (60.000 pesetas al año).

La solución, según Unicef, es la condonación de la deuda de los países pobres, previa condición de que sus gobiernos usen los fondos así liberados para incrementar los presupuestos de sanidad, educación y otros servicios primordiales.

Este año el informe ofrece una calificación de los países según un Índice de Riesgo de los Niños (IRN) que mide lo peligroso que puede resultar para un niño nacer en un determinado país. Para su elaboración se tienen en cuenta factores como la tasa de mortalidad infantil, el porcentaje de niños que nacen con falta de peso, la tasa de escolarización en primaria, la incidencia del sida entre la población con edades entre los 15 y los 49 años y la seguridad del país según la evaluación realizada por el Grupo Asesor de Seguridad de Unicef.

El informe señala que hay aspectos que no se han podido incluir en el IRN porque no se pueden evaluar: por ejemplo, en los países desarrollados, la soledad de los menores a la salida de la escuela mientras esperan el regreso de sus padres. Tampoco se mide el trabajo infantil, la explotación sexual y la carencia de respaldo familiar.

Pese a todas estas salvedades, el IRN da una idea de dónde debería nacer un niño para tener el máximo de posibilidades de desarrollarse felizmente. La escala parte de valores menores de 5 para los países más seguros y llega al valor 100 de los países de mayor riesgo.

Las cifras presentadas por Unicef no dan muchos motivos para el optimismo. Incluso la erradicación de la poliomelitis, uno de los objetivos prioritarios, se ha visto retrasada en el último año, en el que se produjeron 5.108 casos. Pese a que se ha reducido la incidencia de la enfermedad en un 86% en los últimos diez años, la directora ejecutiva de la Agencia, Carol Bellamy, señaló que los conflictos de Angola y Zaire impiden extender la vacunación, y calculó que harían falta otros 500 millones de dólares para conseguir la erradicación de esa enfermedad.

 

Proponen encierro definitivo de psicópatas

Londres: Los psicópatas considerados peligrosos podrían verse privados de libertad aunque no hayan cometido delito alguno, según la propuesta hecha pública por el Gobierno británico.

La medida que, según el Gobierno no dañaría los derechos civiles de los afectados, tiene como objetivo cubrir un vacío legal que permite a las personas con transtornos graves de la personalidad quedar en libertad si no son consideradas susceptibles de tratamiento por los psiquiatras.

La propuesta incluye dos opciones: la primera de ellas prevé la extensión de los poderes a los tribunales para que puedan imponer cadenas perpetuas a las personas con transtornos de la personalidad que hayan cometido delitos. Los tribunales también podrían ordenar la detención de psicópatas dados de alta en los hospitales si se les considerase un peligro público.

La segunda opción, más controvertida, prevé la imposición de sentencias indeterminadas para personas con transtornos de la personalidad, que quedarían encerrados en unidades de nueva creación.

Estas sentencias quedarían sujetas a revisiones y apelaciones cada cierto tiempo y quienes fueran puestos en libertad podrían tener que comparecer ante las autoridades para que se examinasen sus progresos.

El Gobierno británico calcula que entre 2.000 y 2.500 personas con transtornos graves de la personalidad viven en Inglaterra y Gales, y entre 300 y 600 de ellos están considerados sin tratamiento posible.

Las medidas han suscitado las críticas en los círculos médicos, que han expresado su preocupación sobre la definición de en qué consiste un transtorno grave de la personalidad y cuándo una persona se convierte en peligrosa.

 

Grandes diferencias de mortalidad en hemodiálisis

Madrid: La tasa de mortalidad anual en los pacientes sometidos a hemodiálisis en Estados Unidos es del 25%, mientras que en Europa es del 13%, según ha revelado el análisis epidemiológico I-DOPPS (Estudio Internacional de Resultados de Diálisis de acuerdo con la Práctica Clínica). En este trabajo, emprendido en 1998 y que se concluirá en el 2002, participan un total de 8.000 pacientes de Estados Unidos, Japón y cinco países europeos: Alemania, España, Francia, Italia y Reino Unido.

"Todavía es pronto para sacar conclusiones. De Japón todavía no tenemos datos y no sabemos muy bien a qué atribuir estas diferencias", indica Fernando Valderrábano, coordinador para España del I-DOPPS y jefe del servicio de nefrología del hospital Gregorio Marañón de Madrid. El estudio observa, sin embargo, que en Europa el 75% de los pacientes renales está controlado por un nefrólogo antes de pasar a la diálisis, frente a sólo un 29% en Estados Unidos.

Otra diferencia es que en Europa el nefrólogo pasa visita en cada una de las sesiones de diálisis (tres días a la semana), y en Estados Unidos, como media, sólo una vez al mes. Según Valderrábano, las principales causas de muerte en los pacientes con insuficiencia renal terminal (fracaso de la función de los dos riñones) que aboca a diálisis o trasplante de riñón son las patologías cardiovasculares, principalmente el infarto.

El Tratado de Hemodiálisis (Editorial Jims; Barcelona, 1999), coordinado por Valderrábano, y en el que han participado 76 especialistas de España, Alemania, Reino Unido, Francia e Italia, señala que la insuficiencia renal es en los países desarrollados una enfermedad de personas mayores.

La edad media de quienes están sometidos a diálisis es de 60 años y los procesos que más frecuentemente conducen al fracaso renal son la hipertensión, la diabetes y ciertas enfermedades del riñón, como la glomerulonefritis. "Gracias a la diálisis", destaca, "pueden sobrevivir miles de personas que sin ella estarían abocadas a la muerte, puesto que sólo el 20% de estos pacientes son tributarios de recibir un trasplante de riñón. Es decir, que en España, que tenemos la tasa más alta de donantes según la población, de los aproximadamente 17.000 enfermos que cada año están en diálisis, sólo unos 3.400 podrían recibir un riñón. El resto no podría operarse, aunque hubiese riñones disponibles, por tener una edad muy avanzada u otras patologías que contraindican el trasplante".

 

Vacunación contra Polio en plena guerra

Luanda: Cooperantes del gobierno angoleño y agencias humanitarias internacionales lanzaron una campaña de vacunación contra la poliomielitis en la que se prevé serán inoculados más de 2,7 millones de niños en los próximos dos días.

La campaña, en la que participan unas 14.000 personas, se extenderá también a las áreas controlados por los rebeldes de la Unión Nacional para la Independencia Total de Angola (UNITA), que se encuentra nuevamente en guerra contra las autoridades de Luanda desde diciembre pasado.

La iniciativa, cuyo costo es de unos cinco millones de dólares, es financiada conjuntamente por el gobierno angoleño, la Organización Mundial de la Salud (OMS), el Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF) y la compañía diamantífera sudafricana De Beers, que mantiene intereses en Angola.

El país sufre desde el pasado abril un virulento brote de poliomielitis y más de mil personas, en su mayoría niños, han perdido la vida, mientras que otras tantas quedaron paralizadas.

 


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